Uno de los lugares más emblemáticos de Rocha (y por qué no de nuestro país!) es Santa Teresa… y es que encantos no le faltan!

Playas de agua transparente y arenas bancas, palmares, una flora y fauna que encantan, palmares… y sin dudas que la “frutilla de la torta” de este paraíso natural está dado por la antigua fortaleza.

El Parque Nacional Santa Teresa tiene ni más ni menos que dos millones de especies de árboles que vinieron de todos los continentes del mundo, y no en vano es conocido por ser uno de las parques, hechos al impulso del hombre, más grandes de la Tierra.

Además de las playas más concurridas: Cerro Chato o El Barco por las familias y La Moza, para los más jóvenes, hay dos puntos imperdibles a los que tampoco se puede dejar de visitar si se anda por la zona:

 

La Fortaleza tiene su singular encanto. Creada en el año 1762 con un espíritu previsor. Los portugueses imaginaban un nuevo conflicto con los españoles, motivo por el que entendieron que era más que justificable la construcción de una estructura entre el océano y la laguna Negra que les sirviera de punto de resguardo y combate. Su estructura inmensa y color ocre merece ser disfrutada y amerita una buena caminata con tiempo. Imposible no llevar cámara de fotos!

 

Se trata de una de las lagunas más extensas de Uruguay y uno de los puntos establecidos como límites de la reserva biológica. Cuenta con una riquísima variedad de fauna (sobre todo de hermosas aves!). Entre las actividades que se pueden realizar en el lugar, se destacan los paseos en “Barcaza” con acceso a la reserva de flora y fauna del “Potrerillo”. Y una de las cosas que aquí no se pueden dejar de hacer es apreciar el atardecer!

 

 

Y tú, ¿ya has visitado estos lugares? ¿Qué es lo que más te ha gustado? ¡Déjanos tu comentario!